• Carta Natal

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    La Carta Natal nos proporciona elementos que colaboran para que a través de ellos podamos saber, conocer, entender y comprender, por qué suceden los hechos y apliquemos este beneficio en nosotros y en los demás. Ella nos sirve como colaboradora puesto que señala por ejemplo, como somos, las virtudes y defectos, los obstáculos a sortear, lo positivo a disfrutar y las áreas en que se manifestaran. Todos los planetas son importante por tener cada uno de ellos características personales, los signos en los que estén ubicados, las casas que ocupen, los aspectos que haya entre ellos o con las cúspides de las casas y las configuraciones que formen dichos aspectos, nos van indicando hechos, tendencias o patrones.

    Hay tres componentes muy relevantes en ella: El Ascendente, que determina la mayor parte de nuestros rasgos, estructura física y nuestra personalidad. Se manifiesta por nuestra hora de nacimiento. El planeta regente del signo que lo determine, tomará un valor muy importante en todas las áreas de la vida. El Sol, que establece nuestra esencia, es el centro de nuestro ser.

    Es quién precisa nuestro signo solar, dependiendo del mes, el día y a veces la hora en que se encuentre en el momento de nuestro nacimiento. La Luna, que marca nuestras emociones, la forma de reaccionar, dependiendo en el signo que se encuentre en el momento de nuestro nacimiento. La Carta se expresa a través de su particular y propio alfabeto de símbolos.

    Su lenguaje es internacional y emplea a los astrólogos para su interpretación. Tener ese privilegio me hace sentir una sensación de bienestar inenarrable.

    Aptitudes de la Carta Natal

    Algunas de ellas son: Conocernos en profundidad, la forma en que nos relacionamos, con qué predominio energético contamos, revela potencial, aptitudes, talentos, cualidades, vocación, carrera, profesión, creatividad, capacidad intelectual, debilidades, virtudes, defectos, sentimientos. Salud, órganos, sistemas, glándulas, vulnerables o sensibles. Hijos, padres, hermanos, entorno laboral, trabajo. Amores, amoríos, parejas. Dónde es mejor establecer el lugar de residencia. Finanzas, dinero, economía, inversiones, bienes raíces, sociedades. Juicios, casamientos, divorcios, compatibilidades y más.